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¡Hola! Hoy tocó día de proteínas y verduras (PV), y mirando blogs de recetas me tenté con las fajitas. Hice una versión propia y espero les guste. No lleva ningún tolerado, y es muy simple. Las cantidades son a gusto (por lo general cocino para más de una porción a fin de freezar para otro día), recordando que en fase crucero se debe consumir un tercio de verduras y dos de proteínas.
Relleno:
1 Cebolla mediana
1/4 Ají verde
Pechuga a la plancha o al horno (desgrasada)
1 cucharita de cilantro o perejil picado
1 par de rodajitas de tomate
Salsa:
1 cucharada de queso Mendicrim 0% (si consiguen yogurt 0% natural, son Gardel)
1 cucharada de leche 0%
1 cucharita de mostaza dijon (o Savora)
1 pizca de curry (o algún condimento que les guste)
1 cucharita de aceto balsámico
En vez de tortillas:
Hojas grandes de lechuga (u otro vegetal: hojas* de repollo rojo o blanco, etc.)
En un sartén antiadherente, reahogar con un poco de agua la cebolla y el ají cortados en tiras hasta que las cebollas estén transparentes (ir agregando agua si es necesario). Luego apagar el fuego y colocar el cilantro o perejil picado. Dejar entibiar (retirar el excedente de líquido de ser necesario).
Cortar en tiras la pechuga -previamente cocida- y mezclarla con la preparación anterior.
Agregar unas rodajas de tomate cortadas en tiras (con orégano) y agregar las especias que gusten.
Mezclar por otro lado, los componentes de la salsa.
Se presenta por un lado las hojas* del vegetal, por otro la salsita y por otro el relleno, y se arman las tortillas a medida que se consume.
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Se enrolla la hoja de lechuga para armar la fajita y... ¡a cenar! |
Los vegetarianos pueden cambiar el pollo por seitán, hamburguesas de soja (Vegetalex), soja texturada, etc.
*Si se utiliza una hoja de vegetal que se quiebra hay que "blanquearlos" en agua hirviendo. Es decir, con una pinza, sumergir las hojas en agua hirviendo un par de segundos. La lechuga que elegí no se quebraba. La otra es hacer los panqueques o tortillas con salvado de avena/de trigo, huevo y leche. Pero esto queda más natural, no hay que restar la avena de la mañana y... cocinamos menos!